La viróloga e inmunóloga del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) afirma que, tras la vacunación, la mejor protección es "que el virus circule".
La investigadora científica en el centro de biología molecular Severo Ochoa del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Margarita del Val, considera un error que se piense que las personas que ya están vacunadas no requieren de una PCR cuando esta prueba ha sido prescrita. Esto es así porque, si bien el medicamento evita la gravedad de la enfermedad e, incluso, la muerte, no hay evidencias de que prevenga los contagios.
Del Val señala que en las residencias de personas mayores hay contagios y brotes, pero no se producen ingresos hospitalarios o defunciones porque la protección de la vacuna es muy buena frente a la enfermedad. Pero se desconoce cuánto pueden contagiar las personas ya vacunadas: “No podemos pensar todavía que los vacunados sean seguros para los demás. Tenemos que pensar que las personas vacunadas pueden actuar como los más jóvenes asintomáticos”.
Por ese motivo, entiende que es un error pensar que no hay que hacer una PCR a personas que ya estén vacunadas cuando se trata de entrar en algunos países, realizar viajes, etc. A su juicio, se deberían hacer, incluso, de forma rutinaria para ver si se dan más o menos casos o menos entre los vacunados y los no vacunados.
Controversia por la segunda dosis
Sobre la controversia por la vacuna que se ha de administrar a los menores de sesenta años que ya han recibido la primera dosis de AstraZeneca, Del Val entiende que la evidencia científica es la que proporciona la Agencia Europea del Medicamento, que dice que la primera y la segunda dosis han de ser del mismo producto: “Esa es la autoridad. Si alguien quiere salir de la ficha técnica es hacer algo excepcional”. La posibilidad de que cada persona elija la vacuna no le parece adecuada.
Recuerda que cada una de las vacunas, así como el padecimiento de la enfermedad, incrementa los anticuerpos ante la enfermedad. Así, después de recibir distintas dosis, el organismo está cada vez más protegido, aunque ambas vacunas sean distintas: “Su efectividad se debe evaluar en ensayos clínicos”.
Asimismo, le sorprende que Pfizer afirme que podría ser necesaria una tercera dosis, porque la mejor protección contra la enfermedad es que el propio virus circule, pero sin producir enfermedades graves y muertes: “Lo importante es que si nos infectamos no desarrollemos síntomas graves, pero vayamos generando cada vez más protección”.
Afirma que no le ve mucho sentido a vacunar a los menores, “porque de lo que trata la vacuna es de evitar la enfermedad grave”.