Gracias a las imágenes de drones y satélites se pueden elaborar mapas, entender patrones y adivinar tendencias, así como analizar los datos y descubrir relaciones entre ellos.
Los Sistemas de Información Geográfica (SIG) se han convertido en una herramienta imprescindible para las empresas encargadas de gestión del agua, porque les permite integrar y representar un gran caudal de información que se beneficia de la transformación digital y los avances en la implantación de sensores en las distintas infraestructuras. Todo ello se encamina, señala la revista especializada IAgua, a la realización de una gestión más eficiente y eficaz del recurso hídrico.
Gestión centralizada
Cualquier dato con un componente geoespacial es susceptible de ser representado en un SIG, señala la publicación, que detalla que estas representaciones se captan a través de satélites, drones, sensores y datos vectoriales. Con ello se unifica una herramienta única que faculta la gestión centralizada.