Mari Carmen Hinojal, vicepresidenta del equipo femenino Tara del Mar, afirma que las féminas suplen "con maña" la mayor fuerza de los hombres.
Las mujeres llevan años abriéndose paso en la práctica de la vela latina, un deporte tradicionalmente masculino que en los próximos años ha visto la irrupción de féminas que se han propuesto romper con esa anomalía.
La revolución de 1998
Las mujeres comenzaron “a revolucionar esto un poco” en 1998 con torneos de exhibición, según explica Mari Carmen Hinojal, vicepresidenta del equipo femenino Tara del Mar. Pronto pasaron a la competición reglada y a disputar con hombres, formándose equipos completamente masculinos, otros mixtos y, también, los formados solo por mujeres, como es el caso del Tara del Mar.
Hinojal señala que al comienzo costó un poco, pues se oía a las espaldas el típico “mejor se fueran a su casa a fregar”, pero ahora “hay respeto porque hemos demostrado que tenemos nuestro sitio”.
Maña y fuerza
Considera que en este deporte hace falta “maña y fuerza, mucha fuerza”, lo que da cierta ventaja a los hombres. Sin embargo entiende que es posible suplirlo con habilidad, algo en lo que los hombres no tienen por qué tener mayor proporción que las mujeres.