La consejera de Política Social y Sostenibilidad del Cabildo de Gran Canaria defiende los logros y objetivos del II Plan de Infraestructuras Sociosanitarias de la corporación.
Apunta los problemas que se pueden plantear, en el presente y en el futuro, si se entiende que todos los gastos de las administraciones públicas, como los que se dedican a la asistencia sociosanitaria, son un “gasto superfluo”, se ofrecen argumentos en contra de la recaudación de impuestos o se defiende la privatización generalizada. La consejera recuerda que las administraciones no “gastan” en servicios públicos, sino que se trata de inversiones que redundan en beneficio de toda la sociedad.
II Plan de Infraestructuras Sociosanitarias del Cabildo de Gran Canaria
Tal es el caso del II Plan de Infraestructuras Sociosanitarias del Cabildo de Gran Canaria, que se orienta a la creación de 1.516 nuevas plazas en veintidós centros de nueva creación. Se trata, señala Mena, del proyecto más ambicioso desarrollado en esta materia a lo largo de la historia de las islas.
Sin embargo, por la propia dimensión del Plan, la consejera recuerda que es algo que lleva tiempo, pues los trámites de las administraciones no siempre coinciden con los deseos de la sociedad de que estos recursos estén disponibles cuanto antes. Además, Mena es bien consciente de que ni tan siquiera un plan de esta envergadura podrá proporcionar todas las respuestas a las necesidades sociales relacionadas con la dependencia, motivo por el cual se han puesto en marcha otros muchos servicios, como los de la ayuda específica a domicilio para cada situación de necesidad.
Necesidad de cambiar los planteamientos
Sobre si las 69 plazas ejecutadas hasta el momento no supone una cantidad baja, Mena recuerda que son obras ya ejecutadas y finalizadas, pero no serán las únicas. De la misma manera, indica, se olvida la puesta en marcha de otras plazas que no corresponden al plan de infraestructuras sanitarias, pero que dan respuesta a personas con problemas de salud mental, “que no son menos importantes” y a las que tienen necesidades de rehabilitación.
Mena no quiere dejar pasar la oportunidad de reflexionar sobre la necesidad de cambiar los planteamientos en lo que respecta a la atención sociosanitaria, pues, a su juicio, la solución residencial debería ser la última en una escala que comienza atendiendo a las personas en el lugar donde viven: “No se puede aceptar que personas pasen su vida entera en una solución residencial. Hay que cambiar el sistema”:
“No digo que no”
En otro orden de cosas, Mena no renuncia a la posibilidad de presentar su candidatura por el PSOE a la alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria. Afirma que el Ayuntamiento, del que ya ha sido concejal, siempre la ha llamado mucho, pero “primero hay un proceso interno que hay que resolver” en la ejecutiva local del partido. Asegura que esa es la clave para tomar decisiones de futuro: “No estoy diciendo que no y es una decisión que hay que valorar”.