Indica que una vez recompuesto el partido en la isla, es el momento de dejar el partido y la militancia "con la cabeza alta".
Alejandro Jorge ha abandonado el acta de consejero en el Cabildo de Fuerteventura una vez que su partido ha llevado a cabo la renovación de los cargos en el congreso celebrado hace algunas semanas. Asegura que toma esta decisión para que el partido pueda organizarse de cara a las próximas elecciones. Además del cargo, Jorge renuncia también a la militancia en Nueva Canarias.
Afirma que toma esta decisión porque no le gusta hacer lo que no quiere que le hagan: “Es muy importante saber salir”, señala, al tiempo que recuerda que la situación no ha sido cómoda tras diez años trabajando por el proyecto nacionalista. Apunta que lo pasó muy mal cuando le pidieron que renunciara a la candidatura en favor de Sergio Lloret para reforzar el pacto de las flores con un quinto diputado: “Eso fue un punto de inflexión”.
De “Juzgado de guardia”
Reconoce que su error fue que vendió “lo que tenía que vender” para que saliera el diputado de Fuerteventura: “Hice todo lo que estuvo en su mano por el partido”, pero señala que, en ese momento, Asambleas Municipales de Fuerteventura vio la extrema generosidad de NC como una debilidad “y comenzaron a hacer censuras por todos lados”. Considera que lo que está pasando en Fuerteventura es “de juzgado de guardia” y los responsables deberían pedir perdón.
Afirma que su intención es permanecer en política y concurrir a las elecciones locales en el municipio de Pájara tras un “proceso de escucha”.