Las ayudas ascienden a ocho millones de euros, una cantidad que casi se duplicará en 2023.
El Gobierno de Canarias, a través de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca publicó el pasado viernes la resolución de las subvenciones destinadas a compensar los sobrecostes de la desalación y extracción de agua de los pozos y galerías para riego agrícola.
Estas ayudas que se inyectan a un total de 71 solicitantes, en general comunidades de regantes, cooperativas o empresas agrícolas, supone un aumento de más del 22% en el número de beneficiarios con respecto al año anterior. Cabe resaltar que las ayudas abonadas en 2019, por entonces de 6 millones de euros, se repartieron a 28 solicitantes. Desde entonces se ha ido incrementando paulatinamente el número de beneficiarios hasta alcanzar la cifra actual.
La consejera del área, Alicia Vanoostende, destacó la importancia de estas ayudas “que repercuten directamente en el coste final que pagan los regantes por el agua”. También destacó que “llegan en un momento esencial para el fortalecimiento del sector, que pasa por diversas dificultades en las islas, entre las que se encuentran los sobrecostes energéticos, derivados del incremento de la factura de la luz”.
Por ello, valoró el buen entendimiento con el Gobierno de España, a través de su Ministerio de Transición Ecológica, “que ha sido clave para lograr un aumento significativo de estas subvenciones de cara al 2023, pasando de 8 a 14 millones de euros, que permitirán un empuje a las comunidades de regantes, cooperativas y empresas a la hora de afrontar los gastos energéticos”.
Asimismo, Vanoostende aseguró que desde su departamento, y en colaboración con la administraciones implicadas, “seguiremos insistiendo en la necesidad de poner en marcha diferentes líneas de subvenciones para mejorar las condiciones de los agricultores y la optimización del agua disponible, no sólo para abaratar sus costes, sino para avanzar en la modernización de los regadíos, lo que revierte en una gestión eficiente y de calidad”.