Su presidente, José Perez, afirma que los retrasos se han debido a la compleja burocracia y espera que, esta vez, no se pierdan los fondos europeos.
El presidente de la asociación Pequeño Valiente, José Jerez, espera que no se retrase más la obra de construcción de una nueva torre en el Hospital Materno Infantil de Gran Canaria. Afirma encontrarse “ilusionado y expectante”, esperando que se haga lo antes posible, aunque sabe que serán tres años de obras.
Señala que se trata de unas mejoras que ponen al hospital “en lo más alto del nivel europeo”, ya que contará con siete plantas, dos sótanos y supondrá una mejora “total” para la atención a los pacientes, incluyendo dieciséis habitaciones individuales: “En esta ocasión hay dinero y fondos europeos y no creo que nadie se arriesgue a perder esos fondos”. Máxime en una infraestructura que está en una condiciones “que dan pena”.
“La burocracia mata a la democracia”
Afirma que los retrasos en la construcción se han debido a problemas de burocracia, por lo que pide que se agilicen los procesos sin que se pierda el control del dinero público: “La burocracia mata la democracia”.
Recuerda que el 82 por ciento de los niños que padecen cáncer se curan con un diagnóstico precoz y la supervivencia del otro 18% depende del dinero que se dedica a la investigación, por lo que es muy importante que no se descuide este aspecto, algo que también se aplica a la investigación sobre las denominadas enfermedades raras.