Adrián Tuñón, representante del observatorio estatal de la soledad no deseada-Fundación ONCE, afirma que se trata de un fenómeno que sufren más los jóvenes que los mayores.
Un estudio sobre el impacto de la soledad no deseada en España, elaborado por el observatorio estatal de la soledad no deseada-Fundación ONCE muestra que este fenómeno tiene un coste de unos 14.000 millones de euros cada año, incluyendo los gastos sanitarios, debido a que gozan de peor salud, y los costes laborales, por la menor capacidad de trabajar de los que la padecen.
El portavoz del observatorio, Adrián Tuñón, señala que el estudio obedece a una encuesta a 4004 personas y entrevistas en profundidad a 404 personas. Los datos muestran que, contra lo que se piensa, las personas jóvenes sufren más soledad que las mayores.
Cambios en los patrones de socialización
Así, respecto del 13% de soledad no deseada que confiesan las personas mayores, la cifra se eleva al 22 por ciento en el caso de los jóvenes menores de 24 años, «que son unas cifras muy altas», afirma tuñón.
El experto señala que las causas de esta soledad no deseada son distintas en las personas mayores y en los jóvenes, pues los primeros la sufren a consecuencia de los problemas de movilidad y al hecho de que han perdido a muchas de sus personas queridas. En cambio, los jóvenes la sufren por los cambios de patrones de socialización, con mayor uso de las redes y las tecnologías y menores contactos personales.
6000 millones en gasto sanitario
Las personas con soledad no deseada sufren más todo tipo de enfermedades, no solo las psíquicas, sino también relacionadas con el aparato cardiovascular. Se ha comprobado que estas personas acuden más a los servicios sanitarios, hasta el punto de suponer unos 6000 millones de euros cada año.