Marcos Santiago, secretario general del Sindicato Unificado de Policía en Canarias, afirma que para atender a los que llegan a las islas tienen que desatender otras áreas de la seguridad ciudadana.
El Sindicato Unificado de Policía (SUP), Sindicato mayoritario de la Policía Nacional, insta a las autoridades competentes a poner la atención en una crisis migratoria sin precedentes que está teniendo lugar en la isla de El Hierro, y que se extiende sobre el resto de las Islas Canarias.
En los primeros siete meses de 2023, alrededor de 750 inmigrantes llegaron a la isla herreña, cifra que, en primera instancia, no representó un problema para una población permanente de 11,000 habitantes. Sin embargo, en apenas dos meses, la situación ha dado un giro con la llegada de 3,000 inmigrantes, equivalente al 27% de la población local. Esta cifra ha desbordado los recursos de acogida y ha expuesto la falta de medios y personal policial en todas las islas.
Desde el SUP ya han advertido que la isla de El Hierro apenas cuenta con efectivos policiales, al ser esta una isla donde solo dispone de efectivos de Guardia Civil, si bien, este cuerpo no tiene atribuido entre sus competencias el control de Extranjería y Fronteras, esto es, el control fronterizo de personas así como de su situación administrativa en España.
Como resultado, el Ministerio del Interior tuvo que desplegar a la Policía Nacional de forma permanente en la isla a mediados de septiembre. Actualmente, una decena de agentes de Policía Nacional, procedentes de la Comisaría Provincial de Tenerife, están desplegados a diario en El Hierro para ejercer las competencias de fronteras y extranjería. Esta situación excepcional ha sobrepasado completamente la capacidad de respuesta de la isla.
Además, el SUP reclama refuerzos de la Comisaría General de Policía Científica (CGPC) y la Comisaría General de Extranjería y Fronteras (CGEyF) para hacer frente a esta crisis sin afectar a otras unidades locales y provinciales. La redistribución de recursos ha dejado a otras áreas en comisarías de la isla sin personal adecuado para cumplir sus funciones.
Pérdida de personal y estrés
Esto a su vez provoca una reacción en cascada de pérdida de personal humano así como un estrés adicional en otras unidades de las islas, tales como unidades de Las Palmas, que ahora debe hacer frente a las demandas de Arrecife (Lanzarote), Puerto del Rosario (Fuerteventura) y los migrantes que llegan a Arguineguín (Las Palmas). Ello implica, a mayor abundamiento, la necesidad apremiante de un refuerzo significativo de personal y recursos en todas las unidades de las Islas Canarias, incluido un retén permanente de Unidades de Intervención Policial (UIP) en Arrecife y el Hierro, con el objeto de evitar que la Guardia Civil no reste efectivos de sus zonas con esta presión migratoria para dar seguridad en competencias que son propias de la Policía Nacional. Estas Unidades de UIP prestarían seguridad a los policías que realizan las labores de identificación así como al resto de competencias de extranjería atribuidas a la Policía Nacional.