Hablamos con Carlos Castillo, odontólogo de la Clínica Dental Numancia en Santa Cruz de Tenerife.
Carlos Castillo es odontólogo en la Clínica Dental Numancia en Santa Cruz de Tenerife, una empresa familliar que, desde la declaración del estado de alarma por el coronavirus, está cerrada al público en general, pero "mantenemos el servicio de urgencias para nuestros pacientes". Las clínicas dentales no estaban oligadas a cerrar con el decreto de alarma, pero bajaron notablemente su actividad por recomendarión del Consejo Oficial de Dentistas. Ahora la situación empezará a cambiar en atención al plan de desescalada por fases. Sobre la posible implementación de medidas de seguridad por el coronavirus, las clínicas dentales son "de los sitios más seguros" entre otras cosas porque "tenemos procesos de desinfección" que se aplican como norma habitual en el funcionamiento de las clínicas.
En cualquier caso, cuando las clínicas dentales vuelvan a la actividad normal, previa a la crisis sanitaria, probablemente tendrán que afrontar inversiones para adecuar sus instalaciones a nuevas medidas de seguridad sanitaria derivadas de esa "nueva normalidad" a la que alude el Gobierno. La Clínica Dental Numancia fue fundada en 1972 por "mi suegra, la primera mujer dentista" de las islas, dice Castillo. En Numancia buscan ya fórmulas para que esos gastos añadidos no repercutan en las tarifas que apllican a sus clientes. Y como posibles soluciones se plantea acortar el tiempo de los tratamientos y "organizar menos citas para no incrementar los precios, señala Castillo.