→ «En la anterior legislatura solo se entregaron veinte viviendas en El Hierro» → «Queremos terminar la legislatura con la construcción de 3.000 viviendas» → «La solución inmediata para La Palma pasa por el régimen de alquiler sin pasar a propiedad»
El director del Instituto Canario de la Vivienda, Antonio Ortega, afirma que la vivienda en las islas es «una bomba de relojería», por lo que debe ser un asunto de máxima prioridad para el ejecutivo: «Es el principal problema que visualizan los canarios».
Señala que, desde el año 1990, no se hace una política de construcción de viviendas en Canarias que responda a la alta demanda. Así, en la pasada legislatura, solo se entregaron 20 viviendas en la isla de El Hierro, cuando hay más de 25.000 demandantes de soluciones habitacionales.
Colaboración público-privada
Incluso, al llegar al Instituto, se han encontrado con una delicada situación, porque se han comprometido fondos europeos que es necesario ejecutar antes del año 2026, pero no se ha hecho la gestión necesaria para poner en marcha esos expedientes.
Ortega considera que es preciso hacer una política agresiva de viviendas en la que haya un concierto público-privado que permita dar una respuesta satisfactoria a este problema. A este respecto, considera que un objetivo para la presente legislatura es concluir con 3.000 nuevas viviendas construidas.
Ayudas al alquiler
Mientras tanto, el Instituto de Canario de la Vivienda sigue apostando por las ayudas al alquiler, algo para lo que cuenta con un presupuesto de 50 millones de euros anuales, A esto se suma un parque de viviendas de 14.000, que complementan a las 6.000 de Visocan, unas cifras que están muy por debajo de la media nacional y extraordinariamente alejadas de la Unión Europea.
Viviendas para La Palma
De forma más concreta, Ortega considera que uno de los principales problemas a los que hay que hacer frente es el de las viviendas para las personas afectadas por la erupción del volcán de La Palma.
Señala que, a través de un decreto extraordinario, se resolverá la urgencia de la situación, sobre todo a través de un régimen de viviendas en alquiler que no no puedan pasar a ser un futuro, se cree un parque de viviendas disponible para aquellos que la necesiten.