Juan Jiménez, concejal de Educación, señala que el proyecto se encamina al desarrollo integral de la persona poniendo en sus manos recursos para gestionar las crisis.
El Ayuntamiento de Puerto del Rosario ha puesto en marcha un proyecto de «botiquín emocional» para poner en mano de los jóvenes las herramientas que les permitan hacer frente a las «situaciones disruptivas o estresantes que se dan en ciertas fases del desarrollo», según señala el concejal de Educación, Juan Jiménez,
Proceso madurativo deseable
Se trata de dar herramientas a los adolescentes para poder gestionar ese tipo de situaciones, a través de un equipo multidisciplinar que aborda cuestiones como la inteligencia emocional, el mindfulness e, incluso, la criminología.
El proyecto se orienta a que los jóvenes sean proactivos en la gestión de sus emociones, tratando de evitar los estados de ira y sus consecuencias, de tal forma que, de esa manera, se contribuya a generar «personas íntegras con un proceso madurativo deseable».