→ «Si se pide un debate serio, lo mínimo es plantearnos si estamos haciendo bien las cosas» → «Hay cosas que se están haciendo bien y otras no tanto, aunque culpar de todo al turismo no me parece lo más sano» → «Me gustaría escuchar alternativas, y no solo la de estar en contra del modelo turístico»
El director comercial de Hoteles Livvo, Pablo Guillén, entiende que nadie puede ir contra una manifestación como la de este sábado 20 de abril en todas las islas, «y si se pide un debate serio lo mínimo es plantearse si estamos o no estamos haciendo bien las cosas».
Entiende que hay cosas que se están haciendo bien «y otras no tanto», aunque considera que «culpar de todo al turismo no es lo más sano». En este contexto, indica que le gustaría escuchar alternativas y no solo «estar en contra del modelo turístico». Teme que de esas movilizaciones surjan algunos radicales que quieran formar un partido «y pescar votos en esas aguas».
«No es el momento de tirarnos piedras»
Señala que Canarias ha sabido desarrollar un sector turístico a nivel mundial y no es el momento de tirarnos piedras, porque los problemas «son otros», como que no haya más motores en la economía canaria: «Hay tasas elevadas de paro y pobreza, pero sin el turismo estaríamos peor».
Señala la tendencia a pensar en el turismo como una cuestión de «extremos» entre los grandes hoteleros y las camareras de piso, y no hablar de todos los sectores y profesiones que conlleva el sector.
Vivienda vacacional
Indica que Hoteles Livvo no se dedica al alquiler vacacional y no le parece del todo correcto que otras empresas hoteleras lo hagan, aunque recalca que se trata de una actividad legal. Apunta que no puede ser que con darse de alta en un epígrafe fiscal se pueda desarrollar una actividad turística cuando a las empresas les cuesta mucho armar una oferta,
Considera que el alquiler vacacional tiene aspectos interesantes, «pero ha llegado demasiado lejos» y ha causado problemas a la ciudadanía, «cuando han sido los propios residentes los que han quitado viviendas residenciales del mercado», aunque reconoce que muchos intereses de grandes tenedores «se han colado por la puerta».