La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Pepa Luzardo, denuncia que el presupuesto para el año 2020 presentado a los medios de comunicación por el equipo de gobierno municipal llega "tarde y mal", pues lo que sube "de manera escandalosa", con hasta cuatro millones de euros, es el departamento de Cultura y Carnaval, lo cual contrasta, a su juicio, con los datos de pobreza que sufre la ciudad. Señala que le parece bien la subida en Cultura, pero "canta demasiado" comparado con la congelación a las partidas de entidades que trabajan con la exclusión social y la pobreza, como la Casa de Galicia, Cáritas o Cruz Roja.
Lo mismo se aprecia respecto al denominado IBI social, en el que Luzardo recuerda que el del año 2017 no ha resuelto, mientras que en 2018 y 2019 no se convocó y en el presupuesto de 2020 "ni siquiera la han convocado". A su juicio, "el PSOE habla mucho del tema social, de la familia y de las personas, pero el área social sube muchísimo menos que el área de Cultura".
Asimismo, señala que algo que el equipo de gobierno presenta como una prioridad, la emergencia climática, solo sube en 48.000 euros, mientras que la partida para salarios del servicio de Limpieza se incrementa en un 6% debido a la necesidad de pagar los salarios de tramitación a los trabajadores obligados a readmitir por una sentencia judicial.
Obras paradas e infraestructuras descuidadas
La concejal popular recuerda que la obra de la Onda Atlántica está parada, encargada a una empresa que, con anterioridad, ha hecho la peatonalización de varias calles de la ciudad, pero que ahora, y en ocasiones, solo destina un operario a los trabajos por falta de inspección del concejal de Urbanismo, Javier Doreste. Denuncia la cantidad de comercios cerrados en la avenida de Mesa y López por las obras o las continuas roturas en la calle de Néstor de la Torre.
Asimismo, recalca que el Rastro ubicado en las inmediaciones del Parque de Santa Catalina da "vergüenza y tristeza", con carencias de limpieza y de policía, cuando se trata de una infraestructura que ha de ser digna y atractiva para los turistas que llegan en crucero a la ciudad.
A juicio de Luzardo, el equipo de gobierno debería fiscalizar más a las empresas licitadoras de obras y, llegado el caso, iniciar los trámites para rescatar la concesión, pero sucede que, en su opinión, "el concejal de Urbanismo está más tiempo en el despacho que en la calle".
Servicio de Limpieza
Luzardo señala que cuando se gestiona "mal", como en su opinión sucede en el Servicio de Limpieza, los trabajadores "acuden al juzgado de lo Social y si tienen razón decretan el despido nulo, la readmisión y el pago de los salarios de tramitación". Así sucedió en diciembre de 2018 con 134 trabajadores, lo que ha supuesto para las arcas municipales tres millones de euros.
Ahora son 187 trabajadores los que han culminado sus contratos en los primeros días de enero, a los que "se les ha prometido que seguirían trabajando, aunque lo han hecho sin contrato, y este lunes tendrán que ir a firmar sus cartas de despido". Luzardo cree que volverán a presentar demanda y que el resultado podrá ser el mismo que con el colectivo anterior.