May Gómez, directora del grupo de investigadores de la universidad grancanaria, prevé que los resultados se podrían conocer en 2020.
Un equipo de investigación de las universidades de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), Politécnica de Valencia y Delaware (Estados Unidos), dirigido por May Gómez, ha publicado en la revista Marine Pollution Bulletin un estudio sobre la presencia de fibra de plástico en el aparato digestivo del 80% de las caballas que se capturan en Canarias. Esta fibra, señala la investigadora, procede del lavado de la ropa, que los centros de depuración no son capaces de retener.
Afirma que por regla general no se suele consumir las vísceras de la caballa, "pero los delfines y otros peces sí se las comen" y, por tanto, hay que determinar qué efecto tienen para la salud los contaminantes químicos que tienen estas fibras: "De algunos sabemos que son cancerígenos". Lo que hay que determinar es si durante el tiempo que están en el estómago de las caballas estas sustancias pasan al músculo, "lo cual sería un problema".
Para eso llevarán a cabo un estudio que ha comenzado este mes de febrero y cuyos resultados se conocerán a finales de 2019 o comienzos de 2020, cuando será publicado en revistas científicas.
Considera que una solución sería poner filtros al final del proceso de la lavadora para poder reciclar la fibra.