El director de Desarrollo de Hospitales San Roque desmiente que haya trato de favor por parte de la Consejería de Sanidad.
Sebastián Sansó señala que el nivel de concertación de Hospitales San Roque (HSR) con el Servicio Canario de Salud, no supone más que el treinta por ciento de los servicios que presta la entidad: "La mayor parte del negocio proviene del sector privado", afirma, hasta el punto de que "si mañana se suspendiera la concertación, abriremos las puertas con normalidad".
Señala que la sanidad privada es "un socio colaborador" de "una única sanidad". Así, el papel de la sanidad privada es llegar donde lo público no llega y hacer que toda la ciudadanía "pueda contar con los medios de la sanidad privada". Señala que la sanidad pública canaria es muy buena en el abanico de servicios que presta, "con un grado de satisfacción altísimo". El problema, afirma, es la lista de espera, "que es inabarcable, porque la demanda tiende a crecer". Asegura que ese es el modelo vigente en Canarias, "y está siendo exitoso, como lo demuestra la bajada en las listas de espera".
Un negocio "escasamente rentable"
Reprocha que se hable despectivamente de los beneficios económicos de la sanidad privada cuando "este negocio es escasamente rentable cuando si se lo compara con otros sectores como el turismo. Así, el beneficio de la sanidad privada significa "dar empleo a más de 1000 personas en Hospitales San Roque e invertir en desarrollos que son para el beneficio de toda la población". Asimismo, desmiente el "mantra" de que el deterioro de la sanidad pública beneficia a las privadas: "No es cierto, beneficia a las compañía aseguradoras".
"Crítica política"
Sansó rechaza cualquier trato de favor de la Consejería de Sanidad, que dirige José Manuel Baltar, a HSR, mostrando con datos que otros grupos han mejorado su contratación con la Consejería. Recuerda, asimismo, que el contrato para la prestación de servicios de Medicina Nuclear comenzó con la administración socialista de Jerónimo Saavedra en el año 1991.
Recuerda que Baltar presentó en el Parlamento un exhaustivo informe elaborado por técnicos de la Consejería respecto de la adecuación y rentabilidad del servicio de Medicina Nuclear, pero "cualquier argumento vale para hacer crítica política". Señala que el contrato anual por este servicio, "no llega a los tres millones de euros", con una importante inversión privada, hasta el punto de que si la administración pública quisiera revertirlo "debería acometer una inversión de tres millones de euros más el coste de explotación anual".
Así se pretendió hacer durante el mandato como consejero de Jesús Morera (PSOE). Así, señala Sansó, durante una reunión del Consejo de Salud del Hospital Doctor Negrín, en el que participan todos los actores de la sanidad canaria, se abordó la posibilidad y las asociaciones de pacientes y médicos "dijeron que no había razonamientos técnicos que lo apoyaran, porque el grado de satisfacción es del 99%, en un servicio sin lista de espera y con una excelente integración con los demás servicios del hospital". Señala que pidieron esos informes y no se los entregaron. Ahora Baltar "ha dicho en el Parlamento que ese informe no existe".
Por tanto, considera que las críticas del PSOE al consejero Baltar por ese concepto obedecen a la intención de "atacar al presidente del Gobierno poniendo el acento en la sanidad". Recuerda que Baltar tiene "un bagaje amplísimo como gestor" como lo demuestra el hecho de que fuera, precisamente, el PSOE quien lo llevara a la gestión pública, "pero ahora han puesto énfasis en su última etapa, la de gestor en Hospitales San Roque".
Sansó rechaza cualquier de favor a HSR por parte de Baltar, mostrando cómo otros grupos han mejorado su contratación con la Consejería: "La relación de Hospitales San Roque con el consejero es la misma que la del consejero con cualquier otro operador". A este respecto, está convencido de que cuando acabe la legislatura se evaluará positivamente la gestión de Baltar y se le reconocerá como "un magnífico consejero".