El economista y socio fundador de Auren señala que los votantes de ese partido son atraídos por las propuestas más emocionales.
De las cien medidas de Vox, afirma Francisco Fernández de Pedro, tan solo dieciséis tienen contenido económico, "las demás son más cercanas al sentimiento que a la razón". Señala que la emoción no necesita de cuadros estadísticos para demostrarse, lo cual favorece la vaguedad de las propuestas. A este respecto, considera que el votante de ese partido es, sustancialmente, "un votante enfadado": "Hay una clase media precarizada que no llega a fin de mes que puede explicar los resultados de Vox, pues, como afirma Íñigo Errejón, en Andalucía no hay 400.000 personas de extrema derecha".
Las propuestas económicas de Vox son "muy parecidas a las del PP, liberal, pero más simples y poco desarrolladas: bajada de impuestos, preferencia por el sector privado… probablemente porque al votante no le importa". Sin embargo, considera que la propuesta de un nuevo plan hidrológico nacional es "una idea interesante".
Fernández de Pedro cree que Vox ha sido "bueno para el sistema", como lo fue la presencia de Podemos, "porque empujan al sistema para que se mueva, porque la alternancia del tipo turnismo entre un partido y otro no es bueno para la democracia".
Banco Central Europeo
El economista observa con preocupación la decisión del Banco Central Europeo (BCE) de reducir las inyecciones monetarias que garantiza la liquidez del sistema económico. Desde el 2008 "ha metido ingente cantidades de dinero en el sistema bancario y eso ha cumplido el objetivo. Pero ha anunciado que, a partir del 1 de enero, va a ir rebajando las inyecciones de dinero porque el sistema estaba bien drenado, pero puede haber países que lo estén mejor que otros". Así, por ejemplo, una encuesta realizada por Barclays señala que el tercer problema que podría afectar a los empresarios europeos sería una reducción de la liquidez en Europa.