La abogada especialista en temas bancarios María Luisa Martínez señala que después de la crisis los clientes están mejor informados sobre sus derechos.
Hace algunos años, lo habitual era que los bancos llevaran ante los tribunales a sus clientes, pero hoy se da el caso contrario: son los clientes los que reclaman a su banco. Esto se debe a múltiples factores, entre los que Martínez destaca que se haya tomado conciencia de que no todas las cláusulas bancarias son legítimas. Considera que se ha adelantado mucho, pero "todavía nos queda un camino por recorrer, porque pienso que aún hay productos y cláusulas de las que escucharemos pronunciarse a los tribunales europeos".
Apunta que los juzgados de primera instancia han ayudado mucho a equilibrar la relación entre bancos y clientes, así como el hecho de que la crisis ha servido para conocer mejor los derechos: "la gente ahora pregunta mucho más".
Señala que los bancos tienen muchas dificultades para fidelizar a los clientes, en particular porque la banca no tiene mucha capacidad de crear clientes nuevos: "No son capaces de atraer a los jóvenes, porque no se fían de los bancos".