A pesar de que el Ayuntamiento ha levantado la prohibición por los bajos niveles, la concejalía de Ciudad de Mar de Las Palmas de Gran Canaria sigue realizando trabajos en El Confital para localizar el foco contaminante.
Después de que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria levantara, después de dos meses, la prohibición de bañarse en la playa de El Confital pero no recomendara el baño, el concejal delegado de Movilidad y Ciudad de Mar José Eduardo Ramírez ha aclarado en El Espejo Canario que “desde hace mes y medio los niveles de contaminación del agua son aptos para el baño”, pero la recomendación se debe a que “todavía seguimos haciendo trabajos en la zona y no hemos cerrado el asunto definitivamente” hasta que los técnicos se pronuncien sobre ello “y se hayan explorado” todos los escenarios posibles.
La metodología que está empleando el Ayuntamiento para descubrir el foco que ha producido la contaminación, aún desconocido, es “trabajar por hipótesis, atacarla y descartarla”. Una de las posibilidades era el “foso lleno de lodos y de basuras” que lleva años acumulando la conocida como Casa Roja, pero tras “conectarlo con la red de alcantarillado y limpiarlo” se ha comprobado que no es el origen y se ha descartado. Igualmente ha ocurrido con la zona de Los nidillos, la caseta de la Cruz Roja y con el acuartelamiento de La Isleta y lo próximo será analizar el subsuelo y el mar. Ramírez destacó la labor “que está desarrollando Emalsa en toda la red de los alrededores, sobre todo en la estación de bombeo de El Confital”.
Dado que, según las analíticas realizadas, “los niveles están bajando y, en algunas zonas los indicadores dan cero”, el concejal estima que “algunas de las acciones que hemos realizado están dando resultados”, pero continuarán los trabajos previstos hasta descartar todas las hipótesis.
Respecto a la negativa del cuerpo de bomberos de hacerse cargo del análisis de la Casa Roja, José Eduardo Ramírez alegó que “el área de Seguridad la llevan otros compañeros” pero “las medidas que se adoptaron para que entraran en Los nidillos fueron las máximas”, negando que hubiera algún riesgo para ellos. Los lodos los sacará ahora una empresa especializada, y puntualizó que fue “un sindicato, no el cuerpo” el que ”planteó una queja legítima” que su concejalía tuvo en cuenta.