El recientemente nombrado responsable del área para refugiados de los socialistas, residente en Canarias desde hace 26 años, reclama a África y Europa sentarse para definir unas políticas migratorias más humanas.
El nuevo secretario ejecutivo de Política de Refugiados del Partido Socialista, quien llegó a Canarias en 1992 procedente de Senegal y tras relatar el periplo por el que tuvo que pasar hasta poder sentirse un miembro más de la comunidad, “como cualquier inmigrante”, ha reconocido en La entrevista del día de El Espejo Canario que “hoy, con la realidad migratoria, existen más medios para asistir a la población inmigrante africana en comparación con aquella época”, a pesar de las penurias que aún padecen “muchos compañeros”. Diouf reivindicó su dura biografía “porque me ha curtido y no hay que sentir vergüenza por nada” y sigue visitando su país y localidad de origen para ver a su familia. Igualmente, admitió haber sufrido agresiones racistas que rechazó, respuesta por la que fue condenado aunque, en su experiencia vital y laboral, “la sociedad canaria es acogedora y la convivencia es buena”.
Por otra parte, el secretario ejecutivo calificó de “tópico” la acusación xenófoba de que “los inmigrantes quitan puestos de trabajo” a los nacionales, ni que “estemos fomentando la economía sumergida” porque en ella “están también los españoles y los comunitarios”. Para combatirla, reclamó al Gobierno central y al de la Comunidad Autónoma “más medios, lo que significa más inspectores y subinspectores de trabajo; y tener en cuenta a los empresarios que sacan el jugo no sólo a los inmigrantes, sino también a los canarios”. Tanto “los legales como los ilegales” contribuyen a la economía, puntualizó Diouf, “porque pagan impuestos indirectos” a través del alquiler o los productos de consumo doméstico, señalando que la migración es una “realidad que no se puede obviar”, cuyo ejemplo más cercano es el hecho de que “hoy en día hay más canarios fuera de Canarias que inmigrantes residiendo aquí”.
El pasado año “murieron 5.000 personas” migrantes de África hacia el Mediterráneo y el Atlántico, mientras que lo que va de año le ha arrebatado la vida a otras 1.700, computó Diouf, aunque “nadie, nadie, nadie podrá cifrar” nunca las verdaderas cantidades de la tragedia. “África y Europa se tienen que sentar a definir las políticas migratorias”, prosiguió el nuevo secretario ejecutivo socialista, “para que cualquier persona” que quiera desplazarse al continente “lo haga de forma regular”. Asimismo, denunció el incumplimiento de España en esta materia, comprometida a acoger a “17.335 personas, de las que sólo ha asentado y reubicado a unos 1.700”, a pesar de que hay Comunidades Autónomas, “entre ellas Canarias, que tienen desde hace más de ocho meses los espacios preparados para recibir a la gente”. Frente a las políticas del miedo que confunden malintencionadamente inmigración con terrorismo, Diouf desvinculó una de otro y recordó que “Europa tiene los países más envejecidos del mundo y necesitarán mano de obra para que siga creciendo”.
El malestar en el sector chanista [por Chano Franquis] del PSOE grancanario por el nombramiento de Luc André Diouf —activista, sindicalista y comprometido con el socialismo desde que vivía en Senegal— fue contestado por el secretario ejecutivo con un “desconozco este aspecto; yo vengo a sumar, no a quitarle el protagonismo a nadie”.