Ana Zurita, directora general de Industria del Gobierno de Canarias, es optimista sobre la posibilidad de crecer hasta un 25% en valor añadido bruto en el período 2019-2027.
El Auditorio Alfredo Kraus de Las Palmas de Gran Canaria acoge los días 20 y 31 de octubre el II Congreso de la Industria Canaria (Cican 2024), en el que se darán cita 5.000 personas ya inscritas y más de 30 ponentes profesionales del sector.
Ana Zurita, directora general de Industria del Gobierno de Canarias, señala que este congreso constituye un instrumento muy importante para chequear el estado del sector, repasar y evaluar lo que se ha hecho en los últimos dos años y planificar el futuro de la industria de las islas, analizando los indicadores y las propuestas que emerjan a través de las numerosas mesas de trabajo.
Transformación «a pasos agigantados»
Además, la cita permite establecer contacto entre los distintos agentes de sectores, como el industrial y el energético, sometidos a constantes procesos de cambio y en los que se avanza a «pasos agigantados» debido a la transformación digital.
En el congreso se abordarán cuestiones como las de la Inteligencia artificial, la sostenibilidad en las empresas o la economía circular. Como colofón se entregará el premio de excelencia empresarial en sus tres modalidades: gran empresa, pequeña empresa industrial y pequeña empresa no industrial. Zurita considera que esta distinción anima a las empresas canarias a seguir con el impulso de cambio.
Zurita señala que uno de los grandes retos a los que se enfrenta Canarias es el de la productividad y entiende que en el sector industrial se están cumpliendo las expectativas, con muchas posibilidades de alcanzar, en el año 2027, la meta del incremento del 25% del valor añadido bruto con respecto a 2019. Apunta que aún quedan tres años y el cumplimiento hasta la fecha permite ser optimistas.
Retener el talento
Señala que, para ello es imprescindible retener el talento en los oficios industriales, a través de la FP dual y la colaboración con las asociaciones empresariales industriales. Apunta que no se está cubriendo la demanda por falta de preparación de la mano de obra, «un déficit al que hay que hacer frente».