→ «Hay que incorporar la mayor cantidad posible de tecnología y favorecer la incorporación del mérito a los cargos de responsabilidad» → «Lo que no puede ser es que se saque una licitación y que eso sea un statu quo durante cuatro años» → «En el Grupo Icot atendemos cada día a unas 10.000 personas»
El director general del grupo Icot, Domingo Montes de Oca, se muestra optimista ante la supervivencia del estado del bienestar, pero no deja de ser consciente de los riesgos. A este respecto, señala que se requiere de «un continuo trabajo de sostenibilidad que permita conservarlo y transmitirlo a la siguiente generación».
Considera que, a día de hoy, no está tanto en riesgo el derecho al disfrute del estado del bienestar como la gestión de ese derecho, para cuya protección se requiere de la continua incorporación de cuantas tecnologías sean posibles introducir y favorecer la incorporación del mérito a los cargos de responsabilidad.
Un margen de mejora «enorme»
Considera que hay un margen de mejora «enorme» entre los recursos disponibles y aquello que llega a la ciudadanía y, para avanzar, se requiere de una revisión de los trámites burocráticos que puedan dificultar los distintos procedimientos.
A este respecto, indica que las administraciones difícilmente pueden responder a unos cambios que suceden de forma muy rápida, como ha sucedido con la inflación de los últimos meses, lo que ha motivado un desfase entre los costes y los precios que se pagan.
Lo que se requiere es un mecanismo de flexibilidad para el reconocimiento de situaciones especiales: «Lo que no puede ser es que se saque una licitación y que eso sea un statu quo durante cuatro años, con todo lo que pueden cambiar las condiciones en ese tiempo».
35 años de servicios a la ciudadanía
El grupo Icot cumple en estos días sus primeros treinta y cinco años de vida y lo hace dando respuesta a los más de 10.000 canarios que cada día reciben algunos de sus servicios. Para ello emplean a unos 2.300 trabajadores de manera directa.
Montes de Oca recuerda que la empresa, cien por cien de capital canario, comenzó con apenas ochenta empleados, pero gracias a una nueva visión «360» fueron capaces de abandonar el pensamiento lineal y adoptar una visión más amplia sobre las necesidades de la ciudadanía, planeando un continuo entre lo sanitario y lo social, «que hace treinta años no estaba tan en boga».