La candidata de Reunir Canarias a la presidencia del Gobierno afirma que la clase política vive "una realidad paralela" a la que sufren el resto de la ciudadanía.
La candidata de Reunir Canarias a la presidencia del Gobierno, Emma Colao, considera que la consejera de Asuntos Sociales y candidata de Unidas Podemos, Noemí Santana, se ha uniformado con el resto de los políticos, dando la espalda a los intereses de la ciudadanía.
Santana, señala Colao, “no es distinta de Ángel Víctor Torres, Román Rodríguez o Casimiro Curbelo”. Afirma que todos están “encantados de conocerse y de gobernar juntos” y considera que el hecho de que la gente no confíe en la política es porque “todos han prostituido su confianza y su fe. Los partidos están al servicio de otras cosas, no de las nuestras”.
“Los egos hay que controlarlos”
Indica que, en las próximas elecciones locales y regionales, la clase política tiene “mucho que perder” porque viven una realidad paralela a la de la ciudadanía: “Cuando hablan de la realidad de Canarias, no sé de qué hablan”, afirma la candidata, que se refiere a hechos como que crezca el PIB y, al mismo tiempo, la pobreza.
A este respecto, considera que Podemos tenía un espacio consolidado, “que era la promesa de poner las portavocía al servicio de la gente”. Pero, por diversos motivos, han perdido el contacto con las personas y ahora solo se preocupan de los titulares periodísticos: “Empiezan a hablar de ellos mismos y no de lo importante”. Pone como ejemplo la Ley del Sólo Sí es Sí, que, a su juicio, no corrigen porque consideran que no deben mostrar que es un fracaso: “Los egos hay que controlarlos”:
Las cuidadoras, “futuras esclavas”
Señala que, en el caso concreto de las ayudas a la dependencia, “están mintiendo con los datos de una manera insana”. A su juicio, están poniendo a las cuidadoras en las listas de “futuras esclavas”, obligándolas a darse de alta en un régimen especial de la Seguridad Social para que en el futuro vivan de pensiones no contributivas. Señala que eso es algo que va a “reventar en la cara” de todos los canarios cuando todas esas personas vuelvan a pedir una revisión de sus casos “y el resultado les va a llegar cuando la persona dependiente ya esté muerta”. Apunta que un solo bolso de uno de los diputados canarios cuesta tanto como la dependencia de una de esas personas.