Fernando Capote, responsable del equipo técnico de edistribución de la compañía, indica que, desde el primer momento se ha trabajado para que la isla quedara lo menos afectada posible.
La compañía eléctrica Endesa ha comenzado la definitiva reconstrucción de la red que garantiza el suministro energético a la isla de La Palma, una vez que se ha dado por finalizada la erupción del volcán.
Fernando Capote, responsable del equipo técnico de redistribución de la compañía, indica que, desde el primer momento se ha estado trabajado para que la isla quedara lo menos afectada posible. Así, la primera acción, en la misma semana de la erupción, fue garantizar la seguridad de los vecinos y del personal.
Para ello se han desplazado a La Palma más de 40 personas en distintos momentos de la erupción, con el fin de mantener el mayor suministro posible en las zonas afectadas y cortando la red en los mínimos puntos necesarios.
De forma novedosa se ha recurrido al uso de drones para poder trabajar en las proximidades del volcán y así poder aislar los tramos afectados. Además, se han usado cámaras termográficas, grupos electrógenos y telemandos para mantener los servicios.
Planificar la reconstrucción
Al mismo tiempo que se trabajaba en las necesidades más inmediatas, se llevó a cabo una planificación de los daños y, desde la segunda semana de la erupción, se ha estado trabajando en fórmulas para restituir el suministro, “tratando de ir por delante de la lava”. Actualmente ya se planifica la reconstrucción definitiva en un trabajo conjunto con el Cabildo. En este contexto, Capote señala que se van a colocar dos centrales portátiles térmicas en la zona de Los Llanos y Las Manchas, que se utilizarán en caso necesario.
El valor de una empresa fuerte
El técnico pone de relieve que durante todo el trabajo han percibido el valor que da la ciudadanía palmera al hecho de que se haya podido mantener el servicio, “producto de tener una empresa fuerte y el buen mantenimiento que se le ha dado a las líneas en años anteriores”.