El presidente de la Asociación Canaria de Energías Renovables (ACER) recalca que la central de Chira-Soria se necesita ahora, "no dentro de cinco o diez años".
Enrique Rodríguez de Azero señala que en el anteproyecto de Ley del Cambio Climático de Canarias, “la música suena bien” porque “Europa va por ese mismo camino”, pero señala que hay que estar atentos a la forma en que se desarrolla, para que la norma no genere nueva burocracia ni una “moratoria económica que no crea ni riqueza ni empleo”. Asegura que si bien en el Gobierno canario están “concienciados” al respecto, “hay mucho riesgo de que se tomen decisiones equivocadas”.
A modo de ejemplo, muestra el decreto 15/2020, en el que se dispone que el suelo agrícola no pueda acoger industrias de energías alternativas, salvo para uso en invernaderos o estanques de agua: “Nos parece un error”, dice, y señala que ese mismo error puede volverse a cometer en la Ley de Cambio Climático.
Mala situación de partida
Afirma que en Canarias la situación de partida para las energías renovables es “mala”, pero cree que es de aplaudir que el Gobierno canario esté publicando convocatorias para añadir mayor proporción de renovables al sistema.
Respecto de la central de Chira-Soria, en Gran Canaria, afirma que el retraso es “incomprensible” y lo califica de “un caso de burocracia y de los problemas que tiene Canarias para desarrollar proyectos”. Considera que la central está llamada a proporcionar potencia firme y evitar los ceros energéticos, además de acceso a muchos servicios del sistema: “La necesitamos ya, no dentro de cinco o diez años”