El portavoz del grupo nacionalista CC-PNC en el Parlamento de Canarias señala que hay muchas opciones de pacto para dejar fuera a la formación de ultraderecha.
El portavoz del grupo nacionalista CC-PNC en el Parlamento de Canarias, José Miguel Barragán, expresa un “rotundo no” a la hora de pactar con Vox, estando dispuesto a a perder un gobierno con tal de que no entre la formación de ultraderecha en el Gobierno canario.
Señala que, lejos de ser una desventaja, el veto a la formación de Santiago Abascal abre posibilidades a otros pactos “y al buen entendedor pocas palabras le bastan”. Insiste en que jamás pactará con vox “aunque cambie de nombre”.
Un nuevo error en la política con África
En otro orden de cosas, Barragán afirma que el presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, ha cometido “un nuevo error a la hora de afrontar la política africana” en lo que se refiere a su decisión sobre el Sáhara.
A su juicio, se trata de una cesión “al chantaje y eso es inadmisible”, entre otras razones porque nada indica que no se vaya a seguir cediendo en el futuro. Al mismo tiempo, pone de relieve que es una decisión que se toma “vendiendo el futuro de un pueblo que tiene derecho a decidir lo que quiere hacer” y rompe un consenso parlamentario entre todas las fuerzas “sin consultar ni a sus socios de gobierno ni a la oposición”.
Barragán señala, además, los problemas que esta decisión puede suponer para las relaciones con Argelia y para el suministro del gas. Tampoco quiere dejar de poner de relieve la que considera una posición de debilidad por parte del presidente canario, Ángel Víctor Torres, cuya actitud de comprensión con la decisión de Sánchez contrasta con la de la presidenta de Baleares, Francina Armengol, que ha mostrado un claro apoyo al pueblo saharaui.
A su juicio, el problema es que Torres “no sabe distinguir los cargos de presidente de Canarias y de secretario general del partido” por lo que le pide “más firmeza” en defensa de los intereses canarios.
Salud del pacto de las flores
Barragán desconoce si la decisión de Pedro Sánchez afectará a la estabilidad del pacto de las flores que mantienen en Canarias el PSOE, Nueva Canarias y Unidas Podemos, porque “aún no sabemos lo que ha sucedido en realidad”.
Sobre si el distanciamiento entre Nueva Canarias y el PSOE a propósito del problema del Sáhara, puede propiciar un acercamiento entre nacionalistas, Barragán indica que las relaciones entre Coalición Canaria y NC “siempre están ahí” como lo demuestra que en breve se vuelva a ver para formalizar el relevo de diputados en el Congreso: “Nunca vamos a dejar de hablar con Nueva Canarias”, aunque aboga por dejar de lado la “política-ficción”.
Debate sobre el estado de la nacionalidad
En lo que respecta al inminente debate sobre el estado de la nacionalidad en el Parlamento de Canarias, Barragán señala la gestión de la dependencia como uno de los mayores fracasos del gobierno de Ángel Víctor Torres. Afirma que, con más recursos que nunca y con una mayor plantilla, la situación del departamento “es de pena”.
Asimismo, apunta la errática política en energías alternativas, en la que “no han sacado un solo megavatio nuevo que no viniera del ejercicio anterior”. Denuncia que el ejecutivo pone toda la responsabilidad en los ayuntamientos y sospecha que quieren poner un impuesto a las renovables, “cuando de lo que se trata es de favorecer fiscalmente a los que tratan de reducir la huella de carbono”. No deja pasar la oportunidad de reprochar al Gobierno canario su posición contraria a la introducción del gas, una energía que considera indispensable como transición, aparte de su uso en el sector naviero.
Entre las críticas al Gobierno, incluye también la gestión de la sexta ola de la pandemia de la covid-19, que lo cogió “desprevenido por la alegría con que afrontaron la vacunación diciendo que todo había acabado”.
Finalmente, sobre la gestión de la erupción de La Palma, valora la actuación en lo que se refiere a la emergencia vulcanológica, pero no así los trabajos de recuperación, en los que “la alegría” del Gobierno canario y central no se corresponde con la preocupación de los vecinos.