Juan Carlos Lorenzo: “La solución al drama de la migración pasa por establecer vías legales y seguras”

Un momento de la reunión entre Ángel Víctor Torres y José Manuel Albares

Un momento de la reunión entre Ángel Víctor Torres y José Manuel Albares

El coordinador territorial de CEAR Canarias recuerda que la mayor parte de las personas que llegan a las islas lo hacen forzados por las condiciones en sus países de origen,

El coordinador territorial de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) Canarias, Juan Carlos Lorenzo, afirma que la solución al drama de la inmigración pasa por establecer vías legales y seguras que eviten la importante cantidad de muerte que se producen tratando de llegar a las costas canarias.

“Se está produciendo mucho sufrimiento”

“Se está produciendo mucho sufrimiento”, afirma Lorenzo, que recuerda que las migraciones hacia Canarias son producto de desplazamientos forzados, no voluntarios, que obedecen a los conflictos bélicos y a los efectos del cambio climático, “que han convertido muchas zonas de África en un erial”. 

Las personas que se aventuran a emigrar, señala, deben realizar un trayecto muy largo y complicado por el continente antes de llegar a la costa, donde embarcan en una travesía por la ruta más mortífera del mundo: “La única forma de luchar contra este dramatismo y contra las mafias que se aprovechan es establecer vías legales y seguras de poder acceder”. 

Un proceso estructural

Lorenzo está convencido de que el proceso de las migraciones es estructural y se van a seguir produciendo en tanto no cambien las condiciones de desigualdad y vulneración de derechos que se producen en los países de origen. A este respecto, cree posible que los acuerdos entre España y Marruecos aminoren algo la llegada de personas, “aunque la realidad dice lo contrario”.

Lamenta que las migraciones sirvan como moneda de cambio para otras negociaciones, de carácter comercial e incluso de ansias soberanistas, en las que nada tienen que ver las personas: “Son situaciones que no se caracterizan por el respeto a los derechos humanos”.

Denuncias del Defensor del Pueblo

Asimismo, respalda las denuncias del Defensor del Pueblo respecto a las carencias en los sistemas de acogida en Canarias. Se trata, señala, de un problema de plazas, que no se han incrementado de forma consecuente y no permiten el tratamiento diferenciado a hombres y mujeres. Considera que se debe avanzar hacia una intervención más especializada y con protocolos más engrasados para poder detectar los casos de trata de blancas: “Tenemos un amplio margen de mejoras”.

“La solidaridad no está funcionando”

Una de esas mejoras consiste en no confiar en la voluntariedad de las Comunidades autónomas para acoger inmigrantes, algo que, a su juicio, debe resolver una norma de obligado cumplimiento: “La solidaridad y el compromiso no está funcionando ni se prevé que vaya a haber un atisbo de mejora”.