Dulce María Castellano, policía de la Unidad de Vigilancia e Inspección Administrativa, destaca la total igualdad en el cuerpo con «absoluto respeto» entre los compañeros y la ciudadanía.
La incorporación de las mujeres al Cuerpo General de la Policía Canaria es uno de los empeños del ejecutivo regional, que quiere pasar del once por ciento actual a una cifra cercana, al menos, al cuarenta por ciento.
Dulce María Castellano, policía de la Unidad de Vigilancia e Inspección Administrativa, es un ejemplo de la posibilidad de desarrollar una carrera profesional en el cuerpo. Indica que la situación de la mujer es «estupenda», con condiciones de igualdad entre todos los agentes y con un ambiente de respeto, tanto entre los compañeros como con el resto de la ciudadanía.
Ninguna vocación en concreto
Afirma que no es una profesión para la que se requiera una vocación concreta, porque la Policía Autonómica cuenta con cuerpos para todos los perfiles, por lo que prácticamente todas las personas pueden encontrar acomodo. Lo que sí se requiere es una buena forma física.
Control del transporte
Señala que «todavía hay muchas personas que no nos conocen el cuerpo, pero eso está cambiando» porque su presencia en las calles es cada día mayor. En su departamento realizan una amplia variedad de trabajos, incluyendo el control del transporte de mercancías y viajeros, haciendo los controles pertinentes para que se cumpla con la legalidad.
En general, suelen ser problemas de exceso de peso, que son susceptibles de sanción, llegando al caso de la inmovilización de los vehículos en casos de infracciones graves.