→ «El Puerto de Las Palmas se acabará ampliando y es una pena que no se hiciera cuando había fondos europeos» → «Alguien quiere que solo se consuma petróleo y siempre que surge el gas salen como fieras» → «En el caso de La Caja se me llegó a acusar de estar relacionado com el narcotráfico» → «Román Rodríguez está en Nueva Canarias de plantilla»
El expresidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Hernández, afirma que en Canarias hay muchas personas que están «en contra de las inversiones», motivo por el cual no han prosperado proyectos como la ampliación del puerto o la introducción del gas.
Recuerda que su propuesta de ampliación del Puerto de Las Palmas ocasionó una importante movilización social en contra. Señala que había «un montón de fondos europeos» que hubiesen permitido un mejor funcionamiento del puerto e importantes mejoras en el desarrollo de la ciudad: «La sociedad reaccionó así y no se hizo, pero acabará haciéndose».
«Siempre que surge el gas salen como fieras»
Lo mismo piensa de la actual polémica sobre la introducción del gas licuado en el Puerto de Las Palmas. Asegura que hay alguien que solo quiere que se consuma petróleo «y siempre que surge el gas salen como fieras». Considera que forman parte de ese grupo de personas que «siempre van contra las inversiones».
Hernández ha sido testigo de muchos momentos claves de la historia de Canarias. En particular el de la crisis en La Caja, en la que, recuerda, se le llegó a acusar de estar relacionado con el narcotráfico, «cuando ni siquiera fumo».
«No se puede matar un santo»
Asimismo, recuerda que logró salvar de la quiebra a la UD Las Palmas gracias a la consecución de un préstamo de 2.000 millones de pesetas aprobado por el consejo de gobierno: «El Gran Canaria hay tres santos: el puerto, la UD Las Palmas y la Virgen del Pino, y no se puede matar un santo».
Los «amigos de siempre» de Nueva Canarias
Sobre la situación de Nueva Canarias, señala que su presidente, Román Rodríguez, «está de plantilla» y que el partido lo forman «los amigos de siempre, gente estupenda pero que se podrían renovar». Considera que es un partido muy interesante para articular muchas cuestiones de las islas.
Trabajar dieciséis horas al día
A sus 78 años de edad, señala que sigue en activo, trabajando dieciséis horas al día, como ha hecho «toda la vida»: «No hay prisa por descansar, porque tenemos por delante un descanso eterno».
Recuerda que se arruinó en el año 2008 con la crisis inmobiliaria y que estuvo a punto de morir por una pancreatitis, una enfermedad de la que solo sobrevive una de cada 10.000 personas.