La directora y narradora de 'Mujeres en las islas. Las otras hijas del mestre' afirma que ha pretendido hacer un homenaje a las que buscaron "su voz y mirada en unos tiempos hostiles".
La hija del Mestre (Carlos Luis Monzón, Francisco González, 1928) es un clásico y una pieza fundacional del cine canario: una historia costumbrista en el barrio marinero de San Cristóbal, con alcahueta incluida, que narra la oposición de un padre a que su hija mantenga un romance con un barbero, en vez de con el pescador que él prefiere. Aquella Rosilla, rebelde, encarnada por la actriz María Luisa Padrón, sirvió de inspiración para que Macu Machín arrancará el proceso concluido con el largo documental Mujeres en la isla: las otras hijas del Mestre (España, 2022, 65 min.). Esto es, la segunda pieza de larga duración que se proyecta, a partir de este sábado, 23 de abril, en el apartado Canarias Cinema (Cinesa El Muelle).
Las mujeres no son floreros
Machin afirma que ha querido hacer un homenaje a algunas mujeres que vivieron en Gran Canaria “porque me parece que pintar tu aldea es pintar el mundo”. Se trata, dice, de mujeres que decidieron “buscar su voz y mirada en unos tiempos hostiles”
Considera que la sociedad sigue teniendo mucho machismo y también el cine “responde a una estructura patriarcal, vertical, de la cual no se ha desprendido”. Afirma que en demasiadas ocasiones las mujeres solo pueden representar un tipo de papeles y además suelen ser penalizadas por lo que dicen: “Se presupone que una mujer debe ser elegante, comedida, metida para adentro. Un florero”.