La docente del IES La Isleta y coordinadora de proyectos de integración señala las dificultades porque los jóvenes locales «son el producto de la sociedad en la que viven».
Taide Fleitas, docente del IES La Isleta, es la coordinadora del proyecto Sentir La Isleta: convivir para entender, que comenzó en el curso 2022-2023, cuando decidieron generar espacios físicos y temporales donde jóvenes canarios y migrantes del centro Canarias 50, situado en el mismo barrio, pudieran convivir de forma relajada, conocerse, hablar y compartir, generando así sentimientos de amistad que les permitieran profundizar en los procesos migratorios
Distinciones nacionales
El proyecto ha recibido dos importantes distinciones estatales: el premio nacional de educación para el desarrollo Vicente Ferrer y el galardón Inmigración y Convivencia 2023 de los premios aprendizaje-servicio, organizados por diferentes colectivos sociales con participación del ministerio de educación, formación profesional y deportes
Recientemente han hecho una extensión del proyecto que se llama Embajadores Aborígenes: una red de embajadores que impulsa la relación entre jóvenes locales y migrantes para favorecer la convivencia junto a migrantes acogidos en los centros de Canarias 50 y Las Raíces.
Se esfuerzan por integrarse
Taide Fleitas señala que todas las actividades que han programado son una especie de pretexto para generar convivencia entre los jóvenes locales y los migrantes. Destaca que estos últimos se esfuerzan mucho por integrarse, una vez superados los primeros momentos de timidez por estar en un lugar en el que no conocen ni el idioma.
Afirma que es más fácil trabajar con los menores locales cuando son muy pequeños, algo más difícil cuando son mayores. Señala que existe la barrera idiomática, pero ni aún eso es suficiente y, en muchas ocasiones, los migrantes permanecen aislados: «Hace falta más esfuerzo».