El jefe de sección de epidemiología y prevención de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias recuerda que aún no hay ninguna evidencia de que la vacuna sea causante de los casos de trombosis venosa cerebral.
El jefe de sección de epidemiología y prevención de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias y presidente de la Asociación Española de Vacunología, Amós García, señala que la decisión de suspender temporalmente la administración de la vacuna de AstraZeneca obedece a razones de “prudencia”, pues aún no se ha podido establecer la relación causal entre el medicamento y los casos de trombosis venosa cerebral en algunas personas vacunadas.
Señala que esta suspensión cautelar hay que entenderla en el contexto de las incertidumbres de la pandemia de covid-19, lo que hace elevar los criterios de precaución “ante cualquier duda”. A este respecto, argumenta que si países como Alemania, Francia o Italia toman la decisión de suspenderla, “es imposible que España no la tome”.
Causalidad y casualidad
En cualquier caso, recuerda que se han administrado más de 17 millones de dosis, con un perfil muy bajo de casos de trombosis que no son muy distintos a los que sufre la población no vacunada. A su juicio, hay que establecer la “causalidad” y descartar la “casualidad”. Duda de que el principio activo de la vacuna de AstraZeneca pueda producir ese efecto y lamenta que la farmacéutica haya actuado tarde, “sin poner sobre la mesa un informe que hubiese eliminado cualquier forma de duda”.