El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria subraya que las previsiones presupuestarias son inservibles por el incremento del gasto, hasta dos millones en ayuda alimentaria, y la merma de los ingresos.
El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo, asegura que nadie está pasando hambre en la ciudad en estos momentos, pues para evitarlo el consistorio ha movilizado recursos "como no podíamos haberlo previsto". A este respecto, señala que ya se han destinado hasta once instalaciones para las personas sin hogar, personas que, en algunos casos, han llegado desde otros municipios de la isla. Asimismo, se han incrementado los recursos en ayuda a domicilio y para las personas vulnerables.
Asimismo, señala que desde comienzos del mes de marzo, el Ayuntamiento lleva gastados dos millones de euros en asegurar la alimentación de los que la necesitan, partidas que no estaban contempladas en los presupuestos. Así, dice, más de 1.500 familias son atendidas mediante la tarjeta de comida, a otras 44 derivadas por el Servicio Canario de Salud se les facilita un kit de comida, a otras 38 se ofrece asistencia por mediación de Cáritas. A esto se suma unos 300 de niños de cero a tres años que comían en las escuelas infantiles y 3.300 familias que si bien no necesitan comida sí requieren otro tipo de asistencia: "Le puedo garantizar que nadie pasa hambre en esta ciudad, y si alguien conoce una situación puede comunicarla en el 010 para solventarla".
Mayor nivel de pobreza
Señala que es evidente que los niveles de pobreza se han incrementado con la crisis del coronavirus y desea que, cuando pase la crisis, la situación vuelva a normalizarse. No obstante, apunta que cuanto más tiempo dure el confinamiento y el parón de la actividad económica será más difícil de recuperar los niveles anteriores.
Recursos propios
Por el momento, el Ayuntamiento asume estos gastos con recursos propios, lo cual es particularmente difícil en una situación en la que los ingresos están mermando. Señala que si bien el Gobierno central ha anunciado que las medidas sociales se podrán remitir al superávit o al remanente de tesorería municipal, es preciso que se materialice en una disposición. Asimismo, considera que la disposición de la Unión Europea a permitir rebasar el techo de déficit, debería tener un efecto cascada sobre las administraciones locales, de tal forma que estas puedan utilizar para esta situación los 27.000 millones de euros que tienen en los bancos.
No le parece mala idea que las administraciones locales presten dinero a la Administración central para dedicarlo a las necesidades sanitarias, a condición de que se permitiera gastar otra parte del superávit para problemas "que han de solventarse hoy". Asimismo, recuerda que el Gobierno tiene a su disposición el mecanismo europeo de estabilización (MEDE), que es una vía de financiación de 700.000 millones de euros, "que debería ser sin condiciones y a nivel de interés cero".
Difícil de explicar
Sobre el alineamiento Países bajos y Alemania con algunos países de la Europa oriental para rechazar la mancomunación de la deuda europea, entiende que es algo difícil de explicar "cuando el virus está igual en Ámsterdam que en Madrid. Los ciudadanos no lo van a poder entender".