La consejera de Turismo, Industria y Comercio, Yaiza Castilla, señala que las reservas para el verano siguen creciendo, aunque lo hacen a menor ritmo.
Canarias confía en ser destino turístico refugio en el marco de la guerra ruso-ucraniana, una vez que otros territorios competidores se ven más afectados por el conflicto, según señala la consejera de Turismo, Industria y Comercio, Yaiza Castilla.
Incremento de la conectividad aérea
Afirma que, por el momento, las reservas no se han paralizado debido al conflicto, aunque están creciendo a un menor ritmo que hace un mes. Así, las reservas para el verano son superiores a las de la semana anterior, “aunque hay que mirarlos con prudencia” ante la evolución de la guerra y el hecho de que, en la actualidad, se ha incrementado la proporción de viajeros que hacen las reservas a última hora.
Recuerda, no obstante, que la conectividad aérea para el verano se ha incrementado sustancialmente respecto a las cifras anteriores a la pandemia de la covid-19. Para esta campaña están previstas 10,4 millones de plazas, un 4,7% más que en el verano de 2019.
En lo que se refiere a la Semana Santa, la consejera indica que para las reservas en esas fechas influyó de forma determinante el comienzo del conflicto, aunque indica que la Consejería sigue trabajando para incrementar el número de reservas.
Retos del turismo y de la industria
La consejera alerta de los retos que afronta el sector turístico canario así como la industria de las islas debido al incremento de los precios y a la alta dependencia exterior de las fuentes de energía. Apunta el riesgo que supone el incremento del precio de los combustibles y su impacto sobre el precio de los billetes aéreos.
A su juicio, hay que incrementar la soberanía en la producción eléctrica, así como ahondar en el fortalecimiento del tejido industrial. Precisamente este jueves se presentó el plan estratégico 2023-2027 orientado a disminuir la dependencia del exterior.