El primer teniente de alcalde de Santa Cruz de Tenerife señala que el Ayuntamiento ya tiene un proyecto para intervenir en «esa esquina».
El primer teniente de alcalde de Santa Cruz de Tenerife, Carlos Tarife, llama a dejar de lado «el ruido político» y dejar trabajar a los técnicos en la sustanciación del expediente de bien de interés cultural del monumento al dictador Francisco Franco en la avenida de Anaga.
Asegura que el Ayuntamiento va a respetar todas las decisiones y recuerda que la corporación tiene un proyecto para remodelar esa zona y, en caso de que haya que resignificarlo, abrirán un proceso de participación ciudadana, porque «no nos vale que una administración diga que se tiene que llamar monumento de la concordia».
Considera imprescindible buscar solución a esa esquina de Santa Cruz «que merece que se acabe con la polémica», pero asegura que no lloraría si la estatua desapareciera. En cualquier caso, recuerda que no hay un BIC que no haya acabado con algún grado de protección
La solución al problema de la inmigración
En otro orden de cosas, Tarife defiende la posición de su partido en la cuestión migratoria y señala que es «muy clara» y pasa por declarar la emergencia, pedir ayuda a la Unión Europea y, mientras tanto, que el Estado colabore en la acogida de los menores en Canarias.
Señala que la obligación del Gobierno central es convocar la cumbre de presidentes y entonces «se verá qué comunidades autónomas están dispuestas a acoger inmigrantes». Recuerda que hay un documento firmado por Alberto Núñez Feijoo en el que las comunidades del PP se comprometen a acogerlos.
Lamenta que en el reciente debate sobre la inmigración se mezclara con la cuestión del cambio legislativo que beneficiaba a algunos presos de ETA.