El diputado nacionalista estima que este año de transición servirá para encontrar un modelo con el que gestionar mejor las inversiones en cultura
“Le corresponde al Ejecutivo [canario] tomar decisiones políticas y actuar en aquellas cuestiones que necesitan alguna revisión”, ha dicho De la Hoz, en relación a la defensa de la nueva dirección que ayer hizo el presidente del Gobierno, Fernando Clavijo, tras conocerse los datos de la última edición del Festival Internacional de Música de Canarias: un 43% menos ingresos y un 36% menos de espectadores por concierto.
En la misma línea que su presidente, el diputado nacionalista considera que “después de 32 años, los últimos diez perdiendo espectadores y asistentes y sin una estrategia clara” se ha intentado repensar el modelo “para mejorar la situación”. En declaraciones realizadas en Lanzarote, Clavijo dijo ayer que este ha sido "un año de transición" para un festival que mostraba “síntomas de agotamiento”, por lo que se vio necesario hacer "cosas distintas" en la edición de este año. De la Hoz señaló que “en este sentido se ha conseguido dar la vuelta” a esa tendencia con “más de 7.000 espectadores nuevos, se ha pasado de 55 conciertos a 88, ha habido conferencias en paralelo, acercamiento a los conservatorios y estudiantes o por primera vez hemos oído a las dos orquestas capitalinas juntas”, aunque dejó para futuras ediciones “seleccionar mejor los espacios e implicar más a la sociedad”.
Valorando los aspectos positivos, David de la Hoz destacó que por primera vez en la programación del Festival se ha tenido en cuenta a las islas no capitalinas “sin que les cueste recursos”. “Cuando se trata de dinero público hay que pensar bien las cosas”, continuó el diputado, “el Festival siempre ha tenido déficit presupuestario” y, tratándose de inversiones en cultura, “se debe llegar a más gente”. Las decisiones sobre los cambios que requiera el Festival para funcionar mejor recaen sobre la consejera María Teresa Lorenzo, dijo, aunque dejó al Consejo Asesor, convocado para el próximo día 20, dirimir qué fórmula adoptar e, incluso, “replantearse quién tiene que gestionar” las futuras ediciones, en alusión a patronatos o fundaciones tal como se hace en Europa.