«El amaño de las oposiciones es una forma de reírse de los aspirantes»

Personas examinándose en unas oposiciones | ARCHIVO

Personas examinándose en unas oposiciones | ARCHIVO

Víctor Cabeza, director de la academia Las Cortes, afirma que gracias a la dificultad de un examen se ha conocido que hay personas que están entrando al empleo público «de tapadillo».

Víctor Cabeza, director de la academia Las Cortes, señala que «amañar» unas oposiciones, como presuntamente ha sucedido en el acceso a los puestos de auxiliares administrativos en la Comunidad canaria es «una forma de reírse de los aspirantes».

Cabeza, que lleva veinte años formando a opositores en la isla de Tenerife, afirma que nunca había visto un examen tan complicado como el que ha obligado a suspender el proceso selectivo de oposiciones.

«Se les fue la mano»

Señala que, hasta los propios miembros del tribunal han reconocido que «se les fue la mano» con la intención de reducir el número de opositores que podían acceder a la prueba práctica, debido a las reducidas dimensiones en las que se iban a realizar esas pruebas. Cabeza señala que eso sucede en Canarias, porque aquí se establece que toda persona que obtenga una puntuación mayor del cinco puede acceder a la siguiente prueba. En el resto de España se utiliza el sistema de nota de corte.

Indica que Canarias, además, favorece las pruebas memorísticas, una modalidad que acaba «desmoralizando» a los aspirantes y no forma a los empleados públicos que la ciudadanía canaria necesita.

«Modus operandi»

En cualquier caso, estima que una persona bien preparada podría haber aprobado el examen, «aunque no todo el mundo está igual de preparado». Recuerda que un examen difícil no constituye un delito, pero sí que se haya conocido que, entre los aprobados, había personas relacionadas con algunos miembros del tribunal. Afirma que hay suficientes indicios que permiten construir un «modus operandi» para beneficiar a determinadas personas.