El portavoz de la Asociación de Amigos de la Naturaleza, una de las asociaciones convocantes de la manifestación del 20 de octubre, defiende la conveniencia de las movilizaciones en zonas turísticas.
El portavoz de la Asociación de Amigos de la Naturaleza, una de las organizaciones convocantes de la manifestación del próximo 20 de octubre, Eustaquio Villalba, afirma que no se puede malvender el territorio de Canarias «como si fueran perritos calientes», una idea que quien defender en las movilizaciones que se han convocado en diferentes zonas turísticas de las islas.
El turismo «es una parte del problema»
Sobre la conveniencia de hacer manifestaciones en estas zonas, Villalba asegura que el turismo «es una parte del problema» y lo que pretenden hacer ver a los visitantes es que la masificación y los resultados nefastos en el patrimonio natural también les perjudica.
Pone de relieve el caso de Cuna del Alma, en Tenerife, otro «atentado» al patrimonio natural y que responde a un modelo de desarrollo «incompatible con un modelo adecuado, mientras hay playas cerradas porque no se ha invertido en la depuración de aguas». Afirma que el proyecto causa un impacto directo en una de las pocas zonas vírgenes de la isla, «de enorme interés geológico».
Un turismo de calidad «compatible con la conservación del patrimonio».
Villalba entiende que hay turistas «depredadores», como se ve en algunas de las imágenes en las redes sociales, de la misma forma que los negocios «se pueden hacer de muy diferentes maneras», señalando las diferencias entre el modelo de Manuel Fraga Iribarne, ministro de turismo con Franco, de «cuantos más turistas, mejor», o un turismo de calidad «compatible con la conservación del patrimonio».
Organización apolítica
Sobre la politización de estas manifestaciones, Villalba recuerda que la organización ecologista ATAN tiene 53 años de vida y es una organización «sin posición política, que solo se manifiesta en materia de medioambiente. Por tanto, no apoyamos partidos ni de derechas, ni de izquierdas ni de centro».