José Luis Guedes: “La sanción al subinspector es un ataque a la libertad sindical”

El secretario general del SUP denuncia que la desproporción sancionadora por un error administrativo se debe a la actividad sindical del funcionario

La interposición de una querella criminal contra el jefe de la comisaría de La Laguna por un presunto delito de coacciones ha estado motivada básicamente por “un ataque a la libertad sindical”, según manifestó a El Espejo Canario José Luis Guedes, secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP) que presentó la denuncia en el día de ayer en el Juzgado de Guardia de la ciudad.

Guedes informó de que “un subinspector ha sido sancionado con 45 días de suspensión de salario y funciones” por haber cometido un error administrativo en la tramitación de dos expedientes de lesiones. El secretario del SUP afirma que el subinspector confundió las fechas de los plazos porque no tenía formación específica para ello, por lo que se trata de un error involuntario que, además, no ha causado daño a ningún ciudadano. Sin embargo, con anterioridad, “el compañero había comunicado que dejaba el trabajo que desempeñaba para dedicarse a tiempo total en el SUP y que entregaba los expedientes asignados además del trabajo ordinario”, a lo que el jefe le respondió “que eso estaba caducado y lo que tenía que hacer era modificar las fechas anteriores y entregarlo con las nuevas fechas, a lo que el compañero se negó” porque el cambio implicaba cometer un delito de falsedad documental. “Al no acceder a sus pretensiones”, el comisario jefe se dio cuenta del error administrativo y lo sancionó “por no obedecer la orden de hacer el expediente”. Guedes, en representación del SUP, entiende que la sanción se debe en realidad a que el subinspector solicitaba ser liberado sindical: “Parece que no ha gustado que un compañero ejerza la actividad sindical en defensa de los derechos de los demás policías”, dijo.

El SUP ha solicitado recurso de reposición y ha presentado alegaciones ante el director general de la Policía dadas “todas las incongruencias e irregularidades” detectadas en el proceso sancionador, que incluye haberle entregado al subinspector el pliego de cargos nada más terminar su declaración en la Jefatura Superior de Las Palmas, lo cual significa “que ya venía hecha desde Madrid”.