El presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas desmiente irregularidades en las contrataciones y acusa a ‘Canarias7’ de llevar a cabo una «operación de desgaste».
El presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Ibarra, afirma que si bien en la institución portuaria hay excelentes funcionarios, hay otros «muy pésimos» que están intentando «desestabilizar» para buscar posiciones de privilegio ante el inminente relevo del presidente del Puerto: «Estos grupos de presión no han podido hacer nada conmigo».
Policías portuarios con larga antigüedad
Ibarra sale así al paso de las informaciones publicadas por el diario Canarias7 en el que se le acusa de una serie de relaciones laborales irregulares. Entre otras cosas se le acusa de haber creado siete plazas para sus «allegados», cuando en realidad corresponde a policías portuarios que han sacado su titulación de patrón de barco y que han ido entrando entre 1998 y 2010, por lo que «difícilmente pueden ser amigos». Afirma que en marzo de este año se le comunicó al comité de empresa sin recibir ninguna protesta.
La pareja sentimental de Franquis
Asimismo, señalan el caso de la pareja sentimental del dirigente socialista Chano Franquis, que, según Ibarra, entró en el puerto en el año 2011 con un concurso siguiendo los criterios de objetividad, transparencia y libre concurrencia. Señala que en la época de la presidencia de Juan José Cardona, la empleada aprobó un nuevo examen y ascendió a una categoría superior. Actualmente no está previsto sacar ninguna promoción para esta plaza.
Trato de favor en dominio público
Sin embargo, señala que se ha tratado de ocultar el caso de la jefa de dominio público del Puerto que, presuntamente, ha estado utilizando su cargo con un cierto trato de favor a los intereses de su marido. Ibarra afirma que, durante su mandato, ha intentado acabar con estas prácticas y «esto es todo lo que han intentado ocultar en esta guerra».
Indemnizaciones judiciales
Asimismo, menciona el caso de la trabajadora Juana Nieves, de la que se acusa a la Autoridad Portuaria de llegar a un acuerdo extrajudicial por una alta cantidad de dinero. Ibarra señala que esta trabajadora ocupaba uno de los niveles más bajos de la Autoridad Portuaria y no entró con ningún procedimiento concursal. Ha pasado por diversos departamentos, siendo «problemática y sin buen rendimiento».
Señala que el caso ha acabado en un juzgado de lo social y ha sido este el que ha fijado una indemnización: «Es una resolución judicial y la hemos tenido que acatar, pero es absurdo pensar que alguien va con un sobre con 125.000 euros pidiéndole que se vaya».
Ibarra no descarta llevar las «falacias» del Canarias7 ante los tribunales, pero señala que este periódico juega «al desgaste» y llevarlo ante el juez supondrá una importante cantidad de recursos.