→ «Hemos pasado de 35 a 48 millones de viajeros en un año» → «Se trató de una decisión repentina y ninguna empresa tiene recursos suficientes para afrontar un cambio de esta magnitud» → «No prevemos que el número de usuarios baje más allá del cuatro o cinco por ciento»
El director general de Guaguas Municipales, Miguel Ángel Rodríguez, afirma que el previsible fin de la gratuidad del transporte no significará que su uso deje de ser atractivo, pues los precios, a través de los distintos bonos, seguirán siendo lo suficientemente bajos.
Entiende que esta gratuidad va a desaparecer «más pronto que tarde», porque así se ha venido anunciando desde el Gobierno central, y la empresa ya lo ha previsto en los presupuestos para 2025.
Una experiencia positiva
No obstante, apunta que lo que se acaba es la subvención de 81 millones de euros que aporta el Gobierno central para la financiación del transporte, pero no el bono residente, para cuya financiación los cabildos tendrán que seguir aportando dinero. Por ese motivo, no cree que el descenso de usuarios vaya más allá del cuatro o cinco por ciento.
Rodríguez señala que esta modalidad de transporte ha resultado ser una experiencia positiva si se mide desde el punto de vista del incremento «sorprendente» del número de usuarios, pasando de treinta y cinco a cuarenta y ocho millones de viajeros en un año. En 2024 se sigue creciendo a un ritmo del veinte por ciento, por lo que es previsible que, a finales de año, se superen los cincuenta y tres millones de viajeros: «Este es el aspecto positivo y luego están los matices».
Los matices de la gratuidad
Entre esos «matices», Rodríguez señala que la decisión de implementar la gratuidad fue una decisión «repentina» y señala que ninguna empresa tiene los recursos suficientes para afrontar un cambio de esta magnitud.
Señala que la gratuidad hay que analizarla desde cuatro perspectivas, la de los clientes, la del personal, la económica y la de la flota. En esta última, recuerda que se tarda hasta tres meses en licitar un concurso para adquirir un nuevo vehículo, y hasta dieciséis meses para recibirla.