El diputado canario, nombrado presidente de la comisión de investigación sobre la presunta financiación irregular del PP por un acuerdo de última hora con el PSOE, considera que “es un embolado importante”
“No me he resistido más porque no he podido”, ha precisado a El Espejo Canario el diputado nacionalista canario después de que el Partido Popular (PP) y el Partido Socialista (PSOE) acordaran en el último momento de ayer que presida la comisión de investigación sobre la presunta financiación irregular del PP, alegando que es un tema “muy alejado de las preocupaciones y los intereses de Nueva Canarias (NC)”. Según Quevedo, “lo hemos aceptado porque nos lo ha pedido el PSOE y el Grupo Mixto”.
Pedro Quevedo desveló que el diputado por Compromís Joan Baldoví le llamó para explicarle que, con respecto a la comisión, “hay una situación de bloqueo y eres el único que podría desbloquearla”. El diputado bromeó con que “ser el único ya me está empezando a tocar un poco las narices, la verdad”. Acto seguido, prosiguió, “me llamó Antonio Hernando” (PSOE) para pedirle, “por favor”, ayuda para solventar la situación. Quevedo habló de inmediato con la dirección de su partido “porque esto no le hacía gracia a nadie”.
Aunque reconoció “no saber mucho de esto, me lo tendré que estudiar todo”, adelantó que el papel que le ha correspondido es el de “tratar de garantizar que el debate de la forma adecuada”, con transparencia y participación: “Es un embolado importante”, dijo, más teniendo en cuenta que presidir la comisión no servirá para que Nueva Canarias pueda exigir más de los Presupuestos Generales (PGE) 2017 que el Partido Popular, “a los que ya he presentado seis enmiendas a la totalidad”, quiere aprobar con el ‘disputado voto 176’, en manos de Pedro Quevedo.
Respecto a la aprobación de los Presupuestos y a la presión que puede ejercer con su voto, “literalmente me ha llamado media España” para aportarle ideas y reivindicaciones con las que obtener mayores partidas presupuestarias para determinados colectivos en conflicto, como el de las kellys. Quevedo les ha respondido que él es “sólo un diputado” y que, para los casos de Canarias, “hay 15 más” en el Parlamento a quienes se pueden dirigir.
La máxima preocupación de Quevedo como presidente de la comisión es “no hacer el ridículo y evitar que se convierta en un espectáculo mayor que lo que se pretende combatir”.
En virtud del mismo acuerdo entre PP y PSOE, la presidencia de la comisión dedicada a estudiar el rescate bancario recayó sobre de Ana Oramas, diputada por Coalición Canaria.