Juan Carlos Rando, miembro de la Asociación para la Conservación de la Biodiversidad Canaria y profesor de zoología y biología de la conservación de la ULL, afirma que dejar deambular libremente a los gatos es «un despropósito».
La Asociación para la Conservación de la Biodiversidad Canaria (ACBC) rechaza la creación de las colonias felinas y pide que se tenga en cuenta el impacto sobre el medio ambiente de las islas y las especies amenazadas.
«Un despropósito»
Juan Carlos Rando, miembro de la ACBC y profesor de zoología y biología de la conservación de la Universidad de La Laguna, señala que no existe ningún marco o protocolo elaborado por la Comunidad canaria, algo más grave cuando «está demostrado que los gatos que deambulan libremente depredan la fauna y flora silvestre, muchas con problemas de conservación»: «A todas luces es un despropósito».
Señala que los gatos de las colonias y los silvestres, que no tienen contacto con el ser humano, son los primeros causantes de la muerte de la flora y la fauna silvestre, como es el caso de los lagartos gigantes de Canarias, que se han recluido en las zonas más altas y escarpadas para huir de los felinos, algo que no pueden hacer otras especies.