La endocrina y experta en nutrición de Hospitales San Roque, Sara Quintana, explica que la obesidad es "la madre de las enfermedades".
La obesidad, afirma, es una enfermedad y, a la vez, un proceso que complica todas las demás enfermedades, algo así como "la madre de las enfermedades", pues de e ella derivan muchas otras y es la puerta de entrada de otras patologías. Por tanto, "curando la obesidad prevenimos muchas enfermedades, como la diabetes".
La obesidad se define como el exceso de masa grasa, un factor que se mide en proporción entre el peso y la altura de la persona". Se trata de una consecuencia multicausal que responder a patrones alimenticios equivocados, hábitos insalubres, como el sedentarismo,así como el efecto de las bacterias intestinales. "Cada vez se descubren nuevos factores".
La base de la lucha contra la obesidad es la prevención: "Hay que incidir en los hábitos de vida, porque prevalecen más que los factores genéticos". Así, señala que la obesidad "es muy social", en la medida de que " hay una parte de imitación en los niños. Por eso hay que incidir en los padres".
La obesidad más grave es la mórbida, con pesos extremos en la que se requieren tratamientos se abordan más a largo plazo. Santana lamenta que en haya cada vez más pacientes obesos mórbidos. A este respecto, apunta que en los últimos informes Canarias ya no aparece entre las tres regiones españolas con mayor tasa de obesidad: "hay que seguir avanzando por ahí". Sin embargo, alerta de que si bien se ha venido relacionando el menor nivel económico y social con mayor obesidad, las pautas están cambiando debido al consumo masivo de alimentos hipercalóricos.
El tratamiento de la obesidad requiere atención médica, que es quien debe fijar "pautas de alimentación, hábitos a corregir y establecer una dieta mediterránea". Los facultativos pueden prescribir fármacos y técnicas quirúrgicas, pero nunca "productos milagros, que siempre perjudican la salud".
Los fármacos aprobados para luchar contra la obesidad actúan a nivel de la ansiedad, causando pérdida de peso y limitando el apetito por medio de la actuación sobre las hormonas. "Detrás de la obesidad puede haber estrés y ansiedad, que tiene que trabajar".
Quintana se muestra favorable al gravamen productos azucarados, pues "todo lo que sea prevenir es bueno, pero quizás habría que invertir más en educación".