Estefanía Díaz, consultora de Corporación 5, señala que el problema reside en que la oferta es escasa, aunque la demanda sigue subiendo.
El informe La vivienda en Canarias, realizado por Corporación 5, auspiciado por Disa y publicado en la quinta edición de Papeles de Economía parte de datos oficiales de oferta y demanda y sus conclusiones son "bastantes preocupantes", pues en el 2018 detecta la falta de 40.000 viviendas y augura que en 2031 faltarán 140.000 viviendas. Esto es algo que presiona al alza sobre los precios.
Díaz señala que, de promedio, se crean 1.100 viviendas anuales en las islas, pero harían falta 22.000 viviendas para llegar al equilibrio en 2022. La demanda aumenta, "pero la oferta no crece al mismo ritmo". La razón, a su juicio, son las trabas que impone a los constructores la planificación territorial y dificultades con los usos del suelo.