Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos es uno de los objetivos de desarrollo sostenible de Naciones Unidas.
El acceso al agua es un derecho humano, y además uno de los objetivos de la Agenda 2030 de Sostenibilidad de Naciones Unidas, un empeño al que no es ajeno la empresa Emalsa, que garantiza este bien en los municipios de Las Palmas de Gran Canaria y Santa Brígida.
Si bien se ha conseguido progresar de manera sustancial a la hora de ampliar el acceso a agua potable y saneamiento, señala la compañía, existen millones de personas, principalmente en áreas rurales, que aún carecen de estos servicios básicos. En todo el mundo, una de cada tres personas no tiene acceso a agua potable salubre, dos de cada cinco personas no disponen de una instalación básica destinada a lavarse las manos con agua y jabón, y más de 673 millones de personas aún defecan al aire libre.
Respuesta a la covid-19
La disponibilidad y el acceso a los servicios de agua, saneamiento e higiene (WASH) es fundamental para luchar contra el virus y preservar la salud y el bienestar de millones de personas. La covid-19 no desaparecerá sin acceso a agua salubre para las personas que viven en situaciones de vulnerabilidad, de acuerdo con los expertos de Naciones Unidas.