Su presidente, Vicente Marrero, señala que los retos de futuro pasan por el desarrollo de la eólica marina y la náutica recreativa y deportiva.
El Cluster Marítimo de Canarias cumple en estos días sus primeros quince años de vida, con la satisfacción de haber avanzado en materia de economía azul «muy por encima de la media del país y a la altura de muchos países europeos», según señala su presidente, Vicente Marrero.
Considera que ha sido muy importante que las instituciones, como el Gobierno canario, el Consejo Económico y Social y muchas administraciones locales hayan sido sensibles al desarrollo de este importante nicho económico, aprobando los instrumentos apropiados para facilitar la dinamización del sector: «Se ha trabajado mucho para impulsar la economía azul», afirma Marrero, que recuerda que se trata de un sector con mucha capacidad de generar riqueza y empleo.
Eólica marina y náutica recreativa y deportiva
La Estrategia Canaria de Economía Azul ha previsto veinte proyectos de futuro desarrollo, entre los que destaca la eólica marina y la náutica de recreo y deportiva. Marrero señala que en ambas son precisas actuaciones concretas del Gobierno regional y del central.
Respecto de la náutica recreativa y deportiva, es preciso regular los usos de las aguas en un sector en el que Canarias sufre el déficit de atraques de este tipo de embarcaciones, a pesar de su gran potencial.
Considera necesario que, tanto en la eólica como en la náutica, haya normas claras que satisfagan las necesidades de los inversores, que no pueden asumir riesgos en situaciones de inseguridad jurídica. Apunta que es preciso evitar situaciones burocráticas como las que sufrió Plocan para instalarse en las costas de Gran Canaria.