El volumen “Encubrimiento de la identidad en Canarias", editado por el Instituto de Estudios Canarios, documenta 2600 casos a lo largo de los siglos.
Eliseo Izquierdo, escritor, periodista y cronista de la ciudad de La Laguna, recuerda que la curiosidad por la seudonimia se le despertó en su juventud a raíz de la lectura de la colección "Gente Nueva" en la que pudo observar que su abuelo, al que no conoció, había puesto los nombres de los autores de cada seudónimo. Andando el tiempo se dio cuenta de que la seudonimia no era una anécdota, "sino una constante en la cultura canaria". Señala que servía a los autores "para resguardarse de cualquier sorpresa".
El libro recoge 2600 seudónimos de autores canarios, entre ellos Alonso Quesada, que utilizó una cantidad enorme de falsos nombres. Algo similar sucedió en el siglo XIX con Tomás de Iriarte Iriarte o José de Anchieta, que habitualmente firmaba como "el pobre e inútil José".