La paleontóloga y directora del proyecto, Nuria Álvarez, recalca que la dificultad de acceso ha permitido que estos yacimientos no hayan sido expoliados.
El uso de drones ha permitido descubrir restos arqueológicos en las cuevas colgadas de La Palma, según indica Nuria Álvarez, que recuerda que los habitáculos son de difícil acceso, por encontrarse en barrancos, y el uso de estas tecnologías ha abierto “puertas impresionantes”. Esto es así, recalca, porque los dispositivos ahorran la escalada de los investigadores y permiten preseleccionar aquellas cuevas que se van a inspeccionar ‘in situ’.
Cuevas expoliadas
Se trata de un número importante de yacimientos, la mayoría de uso habitacional o funerario. En ellos se han encontrado piezas cerámicas que datan los yacimientos en fechas muy antiguas, aunque aún no se pueden precisar debido a los altos costes de las pruebas del carbono 14.
La importancia de las cuevas colgadas radica en que, a diferencia de las cuevas más accesibles, no han sido sometidas al expolio, por lo que permiten una mejor reconstrucción de la historia de la isla.