En los meses de invierno, las urgencias pediátricas se llenan de niños con cuadros respiratorios. El pediatra de Hospitales San Roque, Jesús Poch, nos explica cómo afrontarlos.
La causa principal de estas afecciones para los niños que ya están escolarizados es el contagio en los colegios. Pero también afectan a niños más pequeños y lactantes, que pueden mostrar también cuadros de bronquiolitis, “que son cuadros más graves” y que cursan con dificultad para respirar y aumento de la tos y las secreciones. Estos casos pueden oscilar entre leves y los que necesitan ingreso hospitalario, motivo por el cual Poch considera que los padres no deben “ni quedarse cortos ni pasarse de largo”, es decir, ni atemorizarse ante cualquier síntoma ni evitar la visita al pediatra cuando el niño muestra un serio malestar.
La bronquiolitis es un cuadro vírico que provoca el cierre de los bronquios. Se diferencia del catarro común por la presencia de la dificultad para respirar y los síntomas de cansancio. Poch recomienda vigilar que “no tengan sesío, esa especie de ruiditos raros en el pecho”.
En niños mayores, lo más habitual son los catarros comunes, muy frecuentes en el primer año de los niños en la guardería, cuando “los niños enferman cada quince o veinte días su hijo”. Estos catarros se producen por la misma mucosidad, y una forma de combatirla es con limpiezas nasales y sueros que limpien las fosas nasales de los niños.
Cuidar la dieta
Además, en estas fechas es conveniente cuidar la dieta de los niños, pues “en Navidad todos nos pasamos un poco y los niños también”. En el caso de Canarias, con una alta tasa de obesidad infantil, este cuidado debe aumentarse, pues “gordura infantil es crear patologías para el futuro”. A este respecto, el pediatra desmiente el mito de que la gordura sea signo de salud: “La salud no se manifiesta por la obesidad o la delgadez, sino por la actividad. Si el niño está decaído o si el niño está está activo”.
Sus consejos son evitar que los niños estén picoteando entre comidas, o que coman comida basura: “Los niños deben comer de todo: Carne, pescado, cereales, verduras, frutas, ensaladas, lácteos… Deben seguir una dieta variada y evitar la bollería industrial y el exceso de golosinas. La comida debe ser sana variada y completa” y, sobre todo, “elegida por los padres, no por los niños”.
El pediatra, dice Poch, no solo puede aconsejar a los padres en temas de salud física, también “y sobre todo en el primer año de vida de los niños”, da a los padres muchos consejos de alimentación y cuidados así como sobre prevención de enfermedades como sería el uso de vacunas. Ya a todo lo largo de la edad pediátrica, los pediatras pueden facilitar consejos sobre cómo evitar ser demasiados condescendientes con los hijos.
Nuevo servicio en Maspalomas
Hospitales San Roque dispone de un nuevo servicio de pediatría en su centro de Maspalomas. Se trata de un servicio integral de urgencias pediátricas que podar atender desde neonatos hasta niños de 16 años.
Además de especialistas de contrastada experiencia, cuenta con un equipo de enfermería igualmente preparado para la atención a la edad pediátrica. La consulta está abierta a todo tipo de pacientes, incluyendo a la población turística que reciben anualmente los municipios del sur de Gran Canaria.